📌PROFESIONALES CON CARISMA 10

En esta ocasión queremos destinar la sección de “PROFESIONALES CON CARISMA” a nuestros profesionales del área de Psicología.

Estos profesionales de la Familia Consolación, deben ser personas con una gran sensibilidad con el mundo de la tercera edad, con capacidad de trabajo en equipo, con gusto por la atención amable a las personas, que además conozca y maneje la psicopatología específica de la persona mayor, así como de otras poblaciones y que identifique las funciones de esta área y se adapte a nuestro modo y valores del Carisma de la Consolación.

 

   A continuación, os hacemos llegar el testimonio de nuestra compañera

Clara González Carrillo,

Psicóloga de la Residencia Nuestra Señora

de la Consolación de Sevilla.

 

“Al ser del barrio donde está ubicada la residencia Consolación de Sevilla, conocía el centro desde chica y siempre observaba con admiración sus amplios jardines y el imponente edificio.

Cuando tuve que realizar las prácticas de la carrera de Psicología, hace cinco años, no dude en elegir este sitio, no solo porque me atrajera el lugar, sino porque compañeras mías habían estado aquí anteriormente y me habían hablado muy bien de su gente y del servicio que ofrecían.

Hace un año tuve la fortuna de entrar como trabajadora y, de esta manera, empaparme aún más del Carisma de la Consolación. Esta no es una residencia cualquiera, es una casa, que acoge a los empleados haciéndoles sentir parte de una familia. La unión de equipo se respira desde todas las áreas.

Siempre he sentido vocación por la gerontología, he enfocado mi carrera laboral a ello formándome continuamente para poder ofrecerles un mejor servicio (actualmente estoy estudiando un Máster en Gerontología y Atención centrada en la Persona).

Pero no todo son los títulos y los conocimientos. La base real para una buena atención son los valores: la empatía, el cariño y el respeto son las piedras desde las que se debe construir el cuidado y así mantener la dignidad de la persona mayor y la máxima autonomía posible. Sin ellos, el resto se desmorona.

Por estas razones es un gusto trabajar aquí y seguir dando calidad y calidez a los mayores, que son el centro de todo.

 

Desde aquí, damos las gracias a todos los que han hecho de esta profesión “de cuidado” una vocación.