A través de nuestro taller de Buenos Días cada mañana, nuestros mayores han querido sorprender a las Hermanas de la Consolación y trabajadores de nuestra Residencia con estas emotivas y hermosas palabras de agradecimiento que han dedicado desde su corazón, por la lucha diaria durante estos meses para que el cariño, el amor, el cuidado, la compañía y la cercanía sea aún más familiar en nuestra casa.
Cada mañana, sentir a nuestros mayores a través del taller de buenos días, es un paso más de fortaleza, de gratitud, de profesionalidad, optimismo, positividad, alegría, renovación y consolación para formar este gran equipo humano que lucha y trabaja día tras día por ellos, por nuestros mayores.
GRACIAS A USTEDES, POR SER ESA LUZ QUE NOS GUIA EN EL CAMINO.